Las manos son una parte muy importante de nuestro cuerpo, ya que son las encargadas de realizar un sin fin de acciones a lo largo del día. Como las usamos tanto y están continuamente en contacto con el exterior son más sensibles y es una de las partes del cuerpo que más sufren.
Debido a su amplio uso no es de extrañar que queden resecas, agrietadas, enrojecidas o incluso doloridas. Así que por la importancia fundamental de estas extremidades, debemos dedicarles el tiempo necesario para cuidarlas diariamente, tal y como se merecen. Para ello, te presentamos a continuación unos cuantos trucos para lucir unas manos siempre suaves.
Factores que secan las manos
Existe una gran cantidad de agentes agresivos que pueden ser los causantes de que nuestras manos estén resecas. Entre los diversos factores encontramos el clima. Aquí el más común es el frío, que causa la disminución de la actividad de las glándulas que segregan la grasa, lípidos y sudor. También produce sequedad la falta de humedad, al vivir en un clima seco o utilizar la calefacción y el aire acondicionado, así como la excesividad de la misma.
Igualmente, producen sequedad en las manos algunos factores externos como la contaminación, donde el humo maltrata a la piel con sustancias que favorecen el envejecimiento cutáneo, o las radiaciones ultravioletas. Así como el uso de algunas sustancias de forma continuada como el jabón, que demacran la piel, al igual que algunos detergentes o solventes formulados para eliminar la grasa. O incluso el consumo de algunos medicamentos que provocan más orina, y a la larga, una mayor deshidratación.
Además, también afectan factores internos de nuestro propio organismo. Como por ejemplo, las alteraciones hormonales que se producen en las mujeres durante la etapa premenstrual, en la menopausia o con la falta de ovulación. Así como estados de estrés y ansiedad que provocan excesiva sudoración; el tabaquismo, que favorece al envejecimiento celular; y la mala alimentación como la desnutrición o la falta de agua, que provocan sequedad en la piel.
Consejos para tener las manos hidratadas
Para decir adiós a la sequedad de las manos es necesario seguir unos simples pasos. En primer lugar, debemos aplicar crema hidratante a las manos varias veces al día, masajeando para que esta penetre bien en la piel, y además, realizar exfoliaciones periódicamente para que estas les devuelvan su suavidad.
Si tienes las manos muy secas, te recomendamos que por la noche, para reforzar el efecto del tratamiento, te apliques una capa generosa de crema en las manos. A continuación, te pones unos guantes de algodón con los que deberás dormir toda la noche. Gracias al calor, la hidratación será mayor, y por la mañana tus manos estarán suaves e hidratadas. En segundo lugar, también deberás tener en cuenta algunas recomendaciones :
- Evitar el contacto con el agua caliente, ya que tiende a resecar la piel.
- Utilizar humificadores o vaporizadores para dar humedad al ambiente y evitar que se pierda la de la piel.
- Usar guantes de algodón para las labores domésticas en seco.
- Usar guantes de caucho para las labores que necesitan un continuo contacto con el agua o con algunos productos nocivos para la piel.
- Evitar exponer las manos al sol durante mucho tiempo, ya que éste las envejece, y consecuentemente, las deshidrata.
- Evitar usar secadores de manos con aire caliente. Lo más idóneo es usar una toalla de algodón.
Recetas naturales para las manos secas
Existen varios trucos caseros para lucir unas manos suaves e hidratadas. A continuación te desvelamos algunos de ellos:
- Pelar un aguacate y extraer su pulpa. Luego se le añaden dos cucharadas de miel, y se baten ambos ingredientes hasta obtener una pasta homogénea. A continuación te aplicas una capa fina de esta pasta sobre las manos y se deja actuar. El secreto de este remedio es que el aguacate tiene un alto contenido en aceites vegetales que le hacen muy nutritivo para la piel y le proporcionan un efecto regenerante y protector.
- Si quieres nutrir la piel y además exfoliarla, debes hervir unos copos de avena en agua hasta que se convierta en una mezcla espesa. Seguidamente, debes empapar tus manos con esta preparación haciendo movimientos circulares -para limpiar en profundidad-, y dejarla puesta durante 15 minutos. Más tarde la aclaras con agua templada. De esta manera las vitaminas, minerales y aminoácidos de la avena alimentaran y revitalizaran tu piel.
- Para dejar atrás la sequedad de tus manos también puede mezclar yema de huevo y aceite en un recipiente. Luego, remueve los ingredientes hasta que se forme una masa de color amarillenta y extiéndela sobre tus manos con la ayuda de una brocha. A continuación, déjala actuar durante 15 minutos y retírala con papel. Al aplicarla la mezcla estará fría, pero poco a poco irá calentándose para dejar tu piel nutrida y suave.
- Para conseguir una mezcla que podrás aplicarte todos los días deberás lavar y pelar una patata mediana. Luego, la debes poner a hervir junto a dos tazas de agua durante unos cinco minutos. Seguidamente, la retiras del fuego y haces un puré con ella. A la patata le añadirás dos cucharadas de leche y dos de miel. Después, lo guardas en un recipiente de vidrio y te lo aplicas diariamente a las manos para tenerlas siempre suaves.
- El último truco casero para unas manos hidratadas consiste en hervir un puñado de apio en dos tazas de agua durante cinco minutos. Después, lo debes retirar del fuego, sacar el apio y dejar que el agua se enfríe. A continuación, sumerge las manos durante cuatro minutos en el agua y luego te aplicas varias gotas de aceite de oliva virgen para que la piel se hidrate lo máximo posible.