Pautas para realizar un masaje anticelulítico

Los masajes son una de las alternativas más usadas cuando hablamos de celulitis. La presión y el movimiento ejercen una acción mecánica sobre los tejidos, las venas y los vasos linfáticos, que cuando se tienen celulitis están comprimidos pos los nódulos celulíticos. Esto mejora la eliminación de toxinas ya que se activa la circulación sanguínea y hace que llegue más oxígeno a las células. El masaje además evita la posible flacidez.

Para lograr el efecto deseado debemos seguir una serie de pautas a la hora de ponernos manos a la obra con un masaje de este tipo. Podemos acudir a algún especialista para que nos haga un masaje más específico pero nosotras mismas podremos obtener buenos resultados si nos ayudamos de algún cepillo o guante especial con los que lograremos, al menos, prevenir la celulitis.

- Lo más aconsejable es masajear todo el cuerpo, especialmente piernas y glúteos con este tipo de accesorios especiales para eliminar este problema.

El agua caliente ayuda a su aparición

- Podemos realizar estos masajes mientras nos duchamos. Es bueno darnos agua fría ya que el agua caliente puede ayudar a su aparición.

- Es importante que no lo hagamos en contra del flujo sanguíneo. Hay que realizarlo si, por ejemplo, se trata de las piernas, en sentido ascendente, es decir, iniciaremos en la planta del pie para terminar en el muslo.

- Practica el masaje de forma cuidadosa. Debemos evitar cualquier maniobra un poco más brusca de lo normal o inadecuada. Es importante que lo hagamos de forma suave. Si notamos que nos duele, es que hay algo que estamos haciendo mal.

- En caso de embarazo hay que llevarlo a cabo con suma precaución. En ningún caso debe practicarse cuando hay fiebre o alguna afección en la piel como por ejemplo eczemas o quemaduras, al igual que debemos tener mucho cuidado si padecemos alguna enfermedad circulatoria.