El cuidado de la piel se ha convertido en los últimos años en un esencial en todo el mundo. Prevenir a largo plazo pero también reparar daños ocasiones por precisamente no cuidárnosla desde la juventud. Para ello la industria de la belleza lleva trabajando en sus laboratorios para encontrar ingredientes y fórmulas que ayuden a conseguir estos dos objetivos de la mejor forma y también de la más rápida. Pero muchas veces, con la mirada puesta en el futuro, la mejor respuesta la encontramos en el pasado.
Dulkamara Bamboo, la marca que conquistó a la Reina Letizia | Foto: Cortesía Dulkamara BambooHace millones de años el cuidado de la piel formaba parte de los cuidados esenciales de quienes habitaban la Tierra por aquel entonces. Por supuesto sus 'skin care' nada tendrían que ver con los que nos hacemos hoy en día, pero había ya una búsqueda de cuidado y reparación. Y teniendo en cuenta los medios, sus búsquedas las hacían en el mejor sitio: la naturaleza. Sobre este mismo cimiento se creó la marca española Dulkamara Bamboo que conquistó a la mismísima Reina Letizia [aquí te lo contamos].
Si bien todos los productos destacan por su etiqueta 'bio' gracias a cuidado de sus ingredientes desde el principio (cultivan los ingredientes medicinales y aromáticos de sus diferentes productos a base de extractos de plantas de la más alta calidad) y que luego se trabajan en su laboratorio, ha habido uno que lleva la historia de la humanidad en cada uno de los miligramos del producto: la Crema Complex Color.
Conoce la Crema Complex Color de Dulkamara Bamboo | Foto: Cortesía Dulkamara BambooSe trata de un maquillaje natural a base de ingredientes como las arcillas naturales o el óxido de hierro que no solo aportan color a nuestro rostro cuando lo aplicamos, sino que además también hace la función de proteger a nuestra piel de los rayos UVA y la luz azul. Y es que si bien estamos cada vez más concienciados con el daño que ocasiona el Sol en nuestra piel, desconocemos más que la luz azul que proyectan los dispositivos electrónicos como teléfono móviles y ordenadores es igualmente dañina y nos exponemos a ella durante muchas mas horas al día.
Los beneficios de óxido de hierro para nuestra piel
El óxido de hierro es uno de los pigmentos minerales que se ha podido comprobar que ayuda a protegernos de la luz azul de los dispositivos electrónicos. Al ser inorgánico, su acción de protección viene gracias a su mecanismo de reflexión de la propia luz evitando que llegue a nuestra piel. A esta acción se suma también que al tener un tono anaranjado esto lo que hace es absorber también la ondas de luz azul disminuyendo así doblemente su efecto dañino y, por ello, evitando así la oxidación de la piel que da lugar a manchas y el propio envejecimiento.
El óxido de hierro fue utilizado ya en la prehistoria para las más que conocidas pinturas rupestres en las cuevas que habitaban. Aunque no hay evidencias de que se usasen también como maquillajes y cosméticos de la época, en varios hallazgos se encuentran pequeños recipientes en los que se mezclaba grasa con óxido de hierro. Más adelante, tanto Nefertiti como Cleopatra los usaban para pintarse las uñas y en la cultura egipcia en general también para pitarse los labios.
Los beneficios de arcilla roja para nuestra piel
La arcilla tiene mayoritariamente un origen volcánico. Sus principios activos son el magnesio (estimula las células y ayuda a la síntesis del colágeno y la eslatina), silicatos de magnesio y aluminio (que alivian ciertos problemas musculares), el zinc (que refuerza el sistema inmunitario de la piel y repara sus célucas), el potasio (regula la cantidad de agua), sílice (que reduce arrugas y líneas de expresión ayudando a la formación de colágeno y reparar y suavizar la piel), selenio (preserva la elasticidad de la piel) y el aluminio (que es cicatrizante).
Ya en la prehistoria se usaba para embellecer la piel y gracias a su carga magnética positiva a atrae a aquellos elementos de carga negativa absorviéndolos y dispersándolos. Junto con la manteca de karité, la arcilla es uno de los ingredientes que usan las tribus africanas para su característico maquillaje rojizo que aplican por toda su cabeza para protegerse de los rayos UV.
