Tratamientos para el cabello: apúntate a la revolución iónica

¿Es posible secarnos el pelo e hidratarlo al mismo tiempo? Debido al uso de secadores, panchas y otros utensilios, a veces nuestro cabello necesita una ayuda extra y una buena dosis de nutrición.

Pero llevamos una vida tan agitada que muchas veces no ponemos remedio, y seguimos haciendo uso de éstos sin darnos cuenta de lo mucho que pueden dañarnos el pelo.

Seguramente hayas oído hablar de los secadores de pelo iónicos o las planchas que poseen esta misma tecnología.

¿Cómo funcionan los cepillos iónicos?

Los iones son moléculas que se encuentran en todos los cuerpos y pueden adquirir carga negativa o positiva según hayan perdido o ganado electrones. Los iones se encuentran en una proporción de cinco a cuatro en una atmósfera equilibrada; si en el aire hay una carga excesiva de iones positivos o carga estática, puede resultar perjudicial para los seres humanos, alterando incluso nuestro sistema nervioso. Normalmente, en las ciudades existe una carga desproporcionada de iones positivos debido a la contaminación.

Lo que la tecnología ha conseguido es aplicar los beneficios de los iones negativos al secado del cabello. Esto ha supuesto una gran revolución en lo que a utensilios para el pelo se refiere. Lo que hace especiales a estos productos es que emiten iones con carga negativa y mejoran la salud del cabello. Restaura la humedad de éste con poco calor y a su vez le hace ganar peso, evitando que las puntas se abran.

Además consigue eliminar el 'dichoso' efecto electroestático que a veces sufre nuestro cabello cuando nos secamos o nos cepillamos el pelo, reduciendo el daño y dejándolo mucho más brillante.

Con las planchas para el pelo ocurre lo mismo. Mediante el proceso de ionización, consigue restaurar el cabello y darle más vitalidad, a medida que lo vamos dando forma. Incluso muchas marcas de belleza han lanzado ya al mercado cepillos que utilizan esta misma tecnología; con ellos podemos cepillarnos y deshacernos de la electricidad estática de sola una pasada.

Una vez más la ciencia nos lo pone un poco más fácil. Ya no tendremos que preocuparnos tanto por el daño que sufre nuestro cabello cuando hacemos uso del secador o las planchas. Eso sí, a pesar de todo siempre debemos usar estos utensilios con moderación.